Las investigaciones de los funcionarios iniciaron con el hallazgo del cadáver del sexagenario presentando múltiples heridas producidas por armas blancas y objetos contundentes, además, se encontraba sin rostro, por cuanto había sido devorado por aves de rapiña (zamuros), por lo que se desarrolló un minucioso trabajo técnico – científico que permitió determinar la responsabilidad de García Hernández.
Con las pesquisas se conoció que el detenido junto a Néstor José Tarazona Carrillo (19), aún por aprehender, se encontraban la noche anterior ingiriendo bebidas alcohólicas, donde el occiso, les informaba disponer de altas sumas de dinero, por lo que García Hernández y Néstor, planificaron despojarlo del mismo y valiéndose del alto estado etílico en el que se encontraba, lo convencen de llevarlo hasta su residencia a bordo de su motocicleta.
Sin embargo, durante el recorrido, ambos lo someten con un arma de fuego y lo conducen a una zona boscosa, donde lo despojan del dinero en efectivo que tenía, oponiéndose el sexagenario al hecho delictivo, procediendo a desenfundar un cuchillo para defenderse, originándose una riña entre ellos, logrando los victimarios despojarlo del arma blanca y asestarle una herida mortal en el pecho, para luego, con una roca, golpearlo en el rostro hasta causarle la muerte.
Finalmente, el caso fue puesto a la orden del Ministerio Público (MP).
