Cita con la historia: Valencia y la Rebelión de los Pardos de julio de 1811
Todos estos representantes de Valencia, diputados unos y miembros de la Sociedad Patriótica otros, fueron firmes partidarios de la independencia
Opinión.- Valencia fue de los principales pilares de la independencia, y se distinguió por el sacrificio de sus mejores hombres y mujeres luchando por la emancipación.
La Junta Suprema de Caracas (de la que formaba parte Valencia) convocó al resto de las provincias de Venezuela para un Congreso, el cual inició sus actividades en marzo de 1811.
Resultaron elegidos 44 diputados. Entre los diputados de Valencia, estaban Fernando Peñalver (rico hacendado con tierras entre Valencia y Güigüe), Juan Rodríguez del Toro (tenía enormes fundos en los alrededores de Guacara) y el padre José Luis Cazorla, mientras que otro valenciano, Miguel José Sanz fue secretario del Congreso. En la “Sociedad Patriótica” estaba otro valenciano, Miguel Peña.
Estos 44 diputados, pertenecían a los estratos más importantes de la sociedad colonial, representaban a la antigua nobleza, los grandes cacaos o mantuanos, la clase de los criollos, es decir, blancos descendientes de españoles. Apenas había algún representante de los pardos, pero no era pardo, sino blanco. Ninguna representación de los indígenas, mucho menos de los negros. Esa era la representación social de ese Congreso, señalar otra cosa es una falsedad.
Todos estos representantes de Valencia, diputados unos y miembros de la Sociedad Patriótica otros, fueron firmes partidarios de la independencia.
Pero luego ocurre un episodio que ha sido nombrado por algunos como “la Rebelión de Valencia”, cuando lo real, pero políticamente incorrecto, sería “Rebelión de los Pardos” de la cual se ha dicho cualquier cantidad de disparates. Veamos:
Los “blancos criollos” o los “cacaos” que declaran la independencia, son los rivales tradicionales de las otras castas: los pardos, los mulatos, los blancos canarios y los blancos peninsulares. Estas castas no simpatizan con el movimiento emancipador iniciado por los blancos ricos y se sienten más seguros con el régimen colonial, así el 11 de julio se inicia en Valencia un movimiento liderado por el venezolano Juan Antonio Baquero y el cura Pedro Hernández, al frente de un grueso contingente de mulatos, el Batallón de Pardos de Valencia y gran número de canarios.
Así lo relata Caracciolo Parra-Pérez en su “Historia de la Primera República”:
“…ahora, subráyase el carácter de la verdadera guerra social que asolará a Venezuela: en Valencia se inicia la rebelión de los pardos contra los blancos. La ciudad quedó en manos de aquellos, de los esclavos y de los salteadores sus cómplices. Muchos vecinos, aterrados, escaparon a duras penas de sus hogares”.
Los blancos de Valencia, desesperados, envían emisarios a Miranda que habían sido mandados por el Congreso a controlar la rebelión. Nuevamente lo relata Caracciolo Parra-Pérez:
“Al propio tiempo, los habitantes blancos, es decir, la gran mayoría de la población, enviaban emisarios a Miranda diciéndose dispuestos a secundarle contra los insurrectos”.
Por su parte, dos periodistas franceses, Poudenx y Mayer que se encontraban en Venezuela en aquellos turbulentos días narran:
“El complot… debía estallar a un mismo tiempo en Caracas y Valencia. Formaban parte del mismo, en esta última ciudad, criollos, europeos, gente de color y negros esclavos a los cuales se les había prometido la libertad”·
José Francisco Heredia, oidor de la Real Audiencia de Caracas, y testigo presencial, escribía:
“Desde entonces quedó arraigado en Valencia el odio mortal entre blancos y pardos, que tan funesto ha sido allí y en toda la provincia por donde se propaga... Los guerrilleros, que después quisieron formar partido bajo la voz de Rey, excitaron esta rivalidad, llegando a ser proverbio en la boca de los europeos exaltados que los pardos eran fieles, y revolucionarios los blancos criollos, con quienes era necesario acabar”.
También vale la pena citar a Juan Uslar en “La Revolución Popular de 1814”.
“En Valencia, los revolucionarios realistas habían insurreccionado… a todos los negros de los alrededores, dictando proclamas igualitarias y reivindicaciones sociales, dando la libertad a los esclavos y la igualdad a los pardos”.
Así fueron las cosas, no aceptemos manipulaciones.
@luishmedicac