Por su parte, Qatar negó que Washington hubiese avisado antes del ataque. “Las declaraciones que circulan sobre que Qatar fue informado del ataque con antelación son falsas. La llamada recibida de un funcionario estadounidense se produjo mientras se oían las explosiones del ataque israelí en Doha”, publicó en X el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Qatar, Majed al-Ansari.
“Bombardear unilateralmente a Qatar, una nación soberana y un aliado cercano de Estados Unidos que trabaja duro, con valentía y asumiendo riesgos para negociar la paz, no promueve los objetivos de Israel ni de Estados Unidos”, declaró Karoline Leavitt a la prensa.
Haber atacado este lugar “deja una muy mala impresión” a Trump, precisó, agregando sin embargo que “eliminar a Hamas” es “un objetivo loable”.
“El presidente Trump cree que este desafortunado incidente podría servir como una oportunidad para la paz” añadió la portavoz.
Posteriormente, el inquilino de la Casa Blanca ha mantenido una llamada con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, quien le ha trasladado que “desea lograr la paz rápidamente”. Leavitt ha dicho que Trump “cree que este lamentable incidente podría ser una oportunidad para la paz”.
Por último, el presidente estadounidense ha hablado con el emir de Qatar, Tamim bin Hamad al Thani, y con el primer ministro, Mohamed bin Abdulraham al Thani, a quienes ha “agradecido su apoyo y amistad”. “Les ha asegurado que algo así no volverá a ocurrir en su territorio”, ha señalado.