, junto a la presentación más esperada por los amantes de este baile tradicional.
A sus 19 años de edad, la joven escaló hasta lo más alto de esta disciplina, siendo la más reciente adquisición de la destacada agrupación de esta academia y donde se miden las bailarinas más avanzadas junto a las profesoras.
Dalal inició con Las Lizarraga a los dos años y medio, y ha permanecido desde entonces manifestando su pasión por el flamenco. En esta ocasión sus talentos y esfuerzo han obtuvieron su recompensa, al poder representar uno de los cinco solos que se realizarían durante la gala de Flamenco Café.
En una entrevista con el equipo de La Revista del Domingo, Jaismar manifestó su emoción por ver sus sueños cumplirse esa noche.
Al preguntarle sobre cómo se sentía antes del gran evento, comentó “Muy muy nerviosa, pero sobretodo contenta y orgullosa por todo lo que hemos logrado”. Además, dijo sentirse “sumamente privilegiada” por ser parte de la Academia de Las Lizarraga y formar parte de La Compañía “de verdad que son lo máximo, lo mejor que me ha pasado”.
Flamenco Café es una historia que narra el camino del grano por diferentes destinos, viajando largas distancias desde África hasta pasar por Arabia, Paris, España y finalmente Venezuela.
Dentro de la representación, Dalal fue la encargada de dar vida al mundo árabe, con algunas sorpresas que esperaban brindar al público, así como el apoyo de otras academias.
“El show que viene habla de todo el mundo, el camino del café” comentó.
A su vez, destacó el nivel de producción que tenían para enmarcar su regreso a los escenarios del Teatro Municipal de Valencia.
Con más de 16 años de experiencia, Jaismar Dalal enseñó a todos los carabobeños su amor por la danza este sábado, superando las expectativas que tenían para esa noche, en un evento que contó una historia con aroma Lizarraga.