Lucas, el niño venezolano hallado muerto en una playa de España sometido a violencia física y sexual: Esto se sabe
Según explicaron fuentes cercanas a la investigación, que se encuentra bajo secreto de sumario, se busca conocer si el niño fue trasladado hasta el lugar donde fue hallado tras su muerte
Sucesos.- El cuerpo del niño venezolano de 4 años de edad encontrado muerto la noche del pasado 3 de diciembre en una playa entre Garrucha y Mojácar (Almería), España, con claros signos de muerte violenta, cuyo datos se confirmarían mediante una autopsia realizada en el Instituto de Medicina Legal (IML) de Almería cuyo datos determinó que la víctima presentaba “signos de violencia física y sexual”.
Los principales sospechosos se trata de su madre, una joven de 21 años identificada como Bárbara Ysmar, embarazada de cinco meses, y su pareja (padrastro del menor), Juan David Herrera, quienes ya se encuentran en prisión sin fianza por los delitos de asesinato y maltrato habitual. El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha informado de que el hombre tiene en vigor una orden de alejamiento sobre la mujer y el menor desde el pasado mes de octubre.
¿Qué pasó?
Lucas, nombre de la víctima, fue reportado como desaparecido ante las autoridades por su padre biológico, quien se encontraba fuera de Almería en el momento de los hechos.
Tras el aviso al Servicio de Emergencias 112 Andalucía donde una tía de la mujer alertó que el menor de cuatro años que "se había desmayado en la playa", "había perdido el conocimiento" y "se encontraba inconsciente". Al parecer, su sobrina le había enviado un mensaje en el que le decía que había abandonado a Lucas en una caseta de la playa de Garrucha.
Las autoridades localizaron el cuerpo sin vida de Lucas en un antiguo cargadero de minerales, detrás de lo que los vecinos de la zona conocen como las bases de los carriles del tren.
Más tarde la madre del menor se entregó en el cuartel de la Guardia Civil y reconoció su implicación en la muerte del pequeño. Las autoridades también detuvieron a la pareja de la joven, que no es el padre biológico de Lucas.
En un audio obtenido por el diario El Mundo, la madre del niño admite entre sollozos su participación en lo ocurrido. “Lucas no reacciona, mi amor. Yo me siento mal, no sé qué pasó”, dice la mujer.
"No sé ni siquiera dónde estoy. Estoy mal de la cabeza (...). Estoy cegada, mi amor, estoy cegada. Estaba en resignación pensando que mi hijo sí está bien, pero creo que no (...) Y yo me quiero morir (...) Yo no quiero estar así. Yo no quiero estar sin mi hijo. No me imagino la vida sin mi hijo, amor", dice parte del audio dirigido a su pareja, a quien pide perdón y le agradece por “intentar formar una familia”.
El sistema “falló estrepitosamente”
Tanto el abuelo materno del niño, Martín, así como la tía de la víctima, habían alertado del maltrato al que era sometido el pequeño, pero aseguró que nunca se activaron protocolos porque “no había partes médicos”.
La tía materna se presentó en la Guardia Civil con fotografías que evidenciaba el maltrato del niño pero la denuncia no prosperó. El sistema, indicó la familia, “falló estrepitosamente”.
Por su parte, la madre y su pareja evitaban llevarlo al hospital para que no se registraran lesiones.
Un video difundido en redes sociales muestra a Herrera gritando al niño venezolano, levantándolo por una pierna y arrojándolo al suelo.
Desde el 20 de octubre pesaba sobre Herrera una orden de alejamiento tanto de la madre como del niño por maltratos previos. Pese a ello, la pareja continuó conviviendo con el pequeño.
Según explicaron fuentes cercanas a la investigación, que se encuentra bajo secreto de sumario, se busca conocer si el niño fue trasladado hasta el lugar donde fue hallado tras su muerte.
Tras conocerse los detalles, el abuelo materno pidió públicamente que recaiga “todo el peso de la ley” sobre los responsables, sin importar que uno de ellos sea su hija. Además, solicitó la custodia del bebé por nacer.