De acuerdo CNN, desde hace un tiempo se ha estudiado las mejoras que puede entregar la dieta mediterránea como reducir el riesgo de diabetes, colesterol alto, enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares y algunos tipos de cáncer, pero ahora se incluye la reducción de azúcar en sangre con una caminata de al menos 2 minutos.

  

“Los descansos intermitentes de pie a lo largo del día y después de las comidas redujeron la glucosa en promedio en un 9,51% en comparación con estar sentado durante mucho tiempo. Sin embargo, caminar intermitentemente con poca intensidad a lo largo del día produjo una mayor reducción de glucosa en un promedio de 17,01% en comparación con estar sentado durante mucho tiempo”, indicó coautor del estudio Aidan Buffey, estudiante de doctorado en el departamento de educación física y ciencias del deporte de la Universidad de Limerick en Irlanda.

Se conoció que se efectuó siete estudios que comparaban el impacto de sentarse, pararse y caminar en los niveles de insulina y azúcar en sangre del cuerpo.

Se reveló que estar de pie era mejor que sentarse para los niveles en sangre, pero solamente se redujo cuando las personas daban una caminata corta después de comer, provocando que sus niveles de insulina sean más estables.