El problema de la niña comenzó cuando su pie derecho tuvo una ampolla lo que más tarde se infectaría comenzando a hincharse de manera grave generando un intenso dolor para Bella.

Los padres buscaron ayuda médica y los doctores diagnosticaron que la niña sufría de síndrome de dolor regional complejo, una condición crónica y sin cura que causa un intenso dolor. El mismo se ha extendido a lo largo de toda la pierna derecha de la pequeña, lo que provoca una pérdida de movilidad en su extremidad inferior. Actualmente, la niña se encuentra confinada a una cama y solo puede moverse en silla de ruedas.

Durante declaraciones al programa “A Current Affair”, la progenitora de Bella manifestó su angustia y preocupación por la condición de la niña, alegando que debido al intenso dolor provocado por la enfermedad, esta no puede ni abrazar a su hija sin hacerle daño, ya que cualquier movimiento es malo para la niña.

Como parte de su experiencia Bella, describe su situación como una combinación de dolores agudos, ardor y hormigueo, calificandola como insoportable. El dolor es tan intenso que no puede bañarse ni siquiera tocar su pie con un pañuelo, ya que cualquier contacto le provoca gritos de dolor.

Después de pasar cuatro semanas en un hospital y recibir 18 medicamentos diferentes, el cuadro clínico de Bella no ha mostrado mejoría. Como último recurso, la familia ha decidido llevar a la niña a Estados Unidos para recibir tratamiento. Sin embargo, se enfrentan a dificultades económicas, ya que no cuentan con los recursos necesarios para cubrir los gastos médicos, por lo que actualmente se encuentran realizando una campaña con el fin de obtener los fondos para cubrir los gastos clínicos de la infante.