Durante su participación en el Congreso Mundial en Defensa de la Madre Tierra, Jiménez destacó cómo las variaciones extremas del clima golpean la actividad agrícola, la biodiversidad y, directamente, la vida de los venezolanos.
En tal sentido, detalló que este exceso de lluvias trajo consigo graves consecuencias, incluyendo el desbordamiento de importantes cuencas fluviales.
"En el caso del Orinoco, estamos viendo un crecimiento que supera los últimos 60 años. Y que, producto de este aumento de lluvias y de inundaciones, que afectaron a más de 7 mil familias venezolanas, vemos incremento también en la proliferación de vectores, de enfermedades asociadas a vectores, como consecuencia de lo que hoy se denomina cambio climático, crisis climática, emergencia climática", enfatizó la ministra.