Porque la vida, hay que vivirla, siempre pensando, que todo va a llegar bien.
Lo negativo, viene pero, tenemos que ayudar a cambiarlo.
En el devenir docente, todos estamos en busca, de ser cada día mejores, para llegar a todos los grupos, con el convencimiento, que el hoy, debe ser, mejor que el ayer, para que, se irradie en cada educando, todas las esencias beneficiosas, que recibimos misericordioso, como lo es Dios.
He, ahí una lección, que debemos todos los docentes, de poner en práctica, todos los días, en nuestro trabajo cotidiano.
Don Bosco, ese gran maestro salesiano, decía: "Que la educación, es cuestión de corazón", qué gran mensaje, debemos tratar de no olvidarlo.
Amigos, colegas, educar es una experiencia de vida, es menester cultivarla siempre.
El fruto lo verá nuestro país, esa es nuestra gran responsabilidad.