Las víctimas mortales fueron registradas en las provincias de Nghe An, Ninh Binh y Ha Tinh, esta última con el mayor número de heridos (5), conforme a los informes iniciales de este martes publicado por Hanói.
Kajiki, calificado como "muy fuerte y peligroso" por las autoridades del país, tocó tierra en la tarde del lunes entre las provincias de Nghe An y Ha Tinh con vientos sostenidos de entre 90 y 117 kilómetros por hora y ráfagas de hasta 150.
El tifón también provocó el derrumbe de siete casas, mientras que casi tres mil 100 viviendas quedaron inundadas y más de seis mil 800 sufrieron desperfectos en el techo. Además, las lluvias causaron daños en decenas de miles de hectáreas de cultivo.
Según el informe oficial, el mal tiempo ha dejado sin servicio de agua corriente a miles de personas y más de un millón de habitantes están sin electricidad, mientras las escuelas siguen cerradas.
Tras tocar tierra el tifón se debilitó hasta convertirse en una depresión tropical, mientras que este martes ya se encuentra en la región norte de Laos rumbo al norte de Tailandia.
El Departamento de Meteorología vietnamita pronostica fuertes precipitaciones en la región centro-norte, incluida Hanói, hasta el miércoles.