La declaración conjunta tuvo lugar pese a que Pionyang continúa ignorando los llamados al diálogo por parte de Seúl y Washington.
El encuentro estuvo encabezado por el primer viceministro de Exteriores surcoreano, Park Yoon-joo; el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio; y el canciller japonés, Takeshi Iwaya. En un comunicado emitido por la Cancillería surcoreana, se destacó que las tres naciones "reafirmaron que su objetivo de la completa desnuclearización de Corea del Norte sigue siendo firme" y acordaron "mantener una fuerte disuasión contra Pionyang sobre la base de una estrecha cooperación trilateral y seguir ampliando su cooperación en materia de seguridad".
Asimismo, la delegación surcoreana subrayó que su postura se mantiene inalterable y resaltó los esfuerzos del gobierno del presidente Lee Jae-myung por reducir tensiones y restablecer el diálogo intercoreano. “La paz y la coexistencia entre las dos Coreas es la opción más realista y práctica para garantizar nuestra seguridad nacional”, afirmó Lee durante su primera reunión del Consejo de Seguridad Nacional desde que asumió el cargo.
A pesar de la ausencia de pronunciamientos oficiales por parte de Pionyang, se han observado algunas señales conciliatorias en los últimos días. Corea del Norte apagó sus altavoces de propaganda en la frontera y envío un patrullero para recibir a seis ciudadanos norcoreanos por el sur está semana.
