¿Cómo es el bombardero estratégico B-2 que EE.UU. ha usado para atacar Irán?
El avión es capaz de realizar ataques antibúnker con una bomba guiada de precisión con un peso de 13.600 kg, conocida también como 'padre de todas las bombas'
Internacional.- Tras el masivo ataque no provocado que Israel lanzó el pasado 13 de junio contra Irán, la Fuerza Aérea de EE.UU. atacó este sábado las instalaciones nucleares iraníes de Natanz, Isfahán y Fordo. Esta última es una instalación subterránea de enriquecimiento de uranio que se encuentra a unos 100 kilómetros al suroeste de Teherán.
Tales acciones se han llevado a cabo con bombarderos estratégicos furtivos Northrop Grumman B-2 Spirit, que arrojaron seis "enormes bombas antibúnker" a la instalación de Fordo, y con submarinos que lanzaron 30 misiles Tomahawk a los objetivos de Isfahán y Natanz.
El B-2 es capaz de realizar ataques antibúnker con la GBU-57 Massive Ordnance Penetrator o MOP (Penetrador de Munición Masiva), una bomba guiada de precisión con un peso de 13.600 kg, conocida también como 'padre de todas las bombas'.
El primer B-2 se presentó públicamente el 22 de noviembre de 1988, cuando salió de su hangar en la Planta 42 de la Fuerza Aérea, situado en Palmdale, California, mientras que su primer vuelo se llevó a cabo el 17 de julio de 1989. El primer avión, Spirit of Missouri, fue entregado el 17 de diciembre de 1993.
Sus misiones de combate incluyen bombardeos en 1999 contra la antigua República Federativa de Yugoslavia. El avión recibió la calificación de plena capacidad operativa en diciembre de 2003 y, posteriormente, participó en las guerras de Irak y Afganistán.
Características
Se trata de un bombardero pesado polivalente de cuatro motores que puede viajar a velocidad subsónica alta y transportar una carga útil de 18.144 kg, por ejemplo, armas convencionales o nucleares. En el caso de la bomba GBU-57, el B-2 puede transportar dos de estas municiones a la vez, lo que le permite atacar estructuras fortificadas en una sola salida. Tiene una tripulación de dos pilotos y su alcance sin repostar es de aproximadamente 6.000 millas náuticas.
Las características de baja observabilidad del bombardero, o 'sigilo', le confieren la capacidad de penetrar las defensas más sofisticadas y amenazar objetivos más valiosos y fuertemente defendidos en el marco de misiones de largo alcance.
