, al menos durante estos cuatro últimos años.
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Estos son los apagones más grandes de la historiaLos niños estaban encerrados en la casa familiar en unas pésimas condiciones de salubridad, incluso rodeados de excrementos, tal como detallan las mismas fuentes. El hecho de que los menores, aclaran desde la investigación, fueran obligados a dormir en cunas de bebés ilustra la situación que presuntamente les imponían sus progenitores.
Las pesquisas, detallan a este periódico fuentes cercanas al caso, arrancaron hace varias semanas cuando las sospechas de que en la casa podía haber tres niños sin escolarizar tuvieron la entidad suficiente como para involucrar a la Fiscalía de Menores de Oviedo, que en todo momento ha estado al tanto de la investigación que se estaba llevando a cabo.
Los primeros pasos de las pesquisas destaparon un drama inesperado: La situación "caótica" y de "extrema gravedad" en la que estaban los tres hermanos, custodiados por unos padres que, aseguran, carecían de un entorno de relaciones sociales amplio y "sólido".
Ahora, están bajo la tutela de los Servicios Sociales del Gobierno de Asturias, tal como aseguran fuentes gubernamentales del Principado consultadas.
Fue la Policía Local, por ser el Cuerpo que hizo una primera aproximación a la situación que se vivía intramuros, quien detuvo a los padres hace dos días y después las pesquisas quedaron en manos del Instituto Armado.
Los progenitores, desde entonces, se encuentran en el cuartel de la Guardia Civil de Oviedo a la espera de sentarse ante el juez. Por el momento, se les atribuye el absentismo escolar de sus tres hijos y las «pésimas» condiciones en las que estaban los niños, a quienes los vecinos no habían visto desde hacía años.
Las fuentes consultadas por este periódico insisten en la «incredulidad» que les produjo la forma de vida a la que los padres, según todos los indicios recopilados en contra de los adultos, sometían a los niños y se sorprenden de que algo así estuviera pasando, dicen, "en una zona tranquila en la que todo el mundo se conoce".
El comisario principal de la Policía Local de Oviedo, Francisco Javier Lozano, resume la operación que inició la Policía Local y después ha continuado la Guardia Civil con una sola frase: "Hemos desmantelado la casa de los horrores", en declaraciones que recoge La Nueva España. "Hemos devuelto a la vida a tres menores. Jamás pensé que algo así podía ocurrir en este país", sentencia Francisco Javier Lozano en este mismo medio local.