Nuestra Gente: Johnny Rivas, cortes que nacen desde el corazón
En sus redes sociales @bearjhonny_ pueden ver todas las creaciones que realiza este gran profesional
Carabobo.- Lo que comenzó como una solución ante vicisitudes familiares se convirtió, con los años, en un oficio lleno de propósito para Johnny Rivas, un barbero que hoy marca la diferencia no solo con sus tijeras, sino también con su forma de ver al otro. Desde un humilde intercambio de cortes con un amigo en el año 2017 hasta abrir su propia barbería, que ya consolida su primer aniversario, Johnny ha tejido una trayectoria hecha de resiliencia, fe y servicio durante casi 8 años.
“Nunca imaginé llegar hasta aquí”, confesó con la voz cargada de emoción en una entrevista para la editorial Notitarde. “Mi mamá falleció en 2017, y ese dolor casi me detiene. Pero mi hermano y mi papá me sostuvieron. Y me hice una promesa: todo lo que lograra, lo haría por ella”.
Esa promesa se materializó en un aprendizaje constante, primero en un curso pagado por su hermano tras graduarse del liceo, y luego en las calles del centro de Valencia, donde trabajó junto a mentores como Álvaro, Joan y Frank. “Ellos no solo me enseñaron a cortar, sino a escuchar y a sentirlos como mis amigos”, sentenció Rivas. Sin embargo, para él, la barbería no se basa únicamente en el talento técnico, sino en la práctica diaria, el buen trato y la calidad en el trabajo. “La gente busca confianza, un lugar donde sentirse en casa”.
Una de las historias que definen su enfoque es la de Mohamed, un cliente que está con él desde el primer día. “Para mí, ya no es un cliente. Es parte de mi familia”. Pero también recuerda con humildad aquel episodio con Jan, un hombre que lo culpó por un aparente mal corte, sin darse cuenta de que había iniciado un proceso de alopecia. “Volvió semanas después, se disculpó, y hoy somos amigos. Esa experiencia me enseñó que detrás de cada persona hay una historia que no siempre vemos”.
Hace exactamente un año, Johnny abrió las puertas de su propio local. “Ser jefe no es fácil, pero es hermoso”, aseguró con una visión que trasciende lo comercial: “Quiero que cada persona que entre aquí no solo salga bien peinada, sino con la sensación de haber sido escuchada”.
En un mundo donde lo efímero domina, Johnny Rivas cree en el poder de las manos que sanan con cada corte y en el legado silencioso de quienes transforman la adversidad en arte.
