El objetivo es liberar las líneas de alta tensión que, según reportes, están haciendo contacto con ramas, vegetación y árboles, lo que representa un riesgo para la seguridad y la continuidad del servicio eléctrico.
La preocupación se centra específicamente en la calle Puerto Cabello en las inmediaciones del Edificio Tomás E. Maduro un área de gran valor patrimonial donde la densidad de la vegetación y la antigüedad del cableado eléctrico aumentan la vulnerabilidad de la infraestructura.
De acuerdo a una de las vecinas afectadas, Maryfel Díaz es notable la desesperación ante la falta de respuesta de los entes competentes. "Se han realizado los reportes, hemos llamado y nada que vienen atender la situación. Son varias casas afectadas, ya estamos desesperados."
Los residentes del casco histórico esperan que la Comisión de Corte y Poda de CORPOELEC pueda desplegar a la brevedad un equipo especializado para ejecutar las labores necesarias.
Esto no solo garantizaría el correcto funcionamiento de las líneas de alta tensión, sino que también mitigaría el riesgo de cortocircuitos e incendios, asegurando la seguridad de las familias que residen en esta importante área de la ciudad.