Nacido en Bejuma, como la mayoría de los vallealtinos, pero mirandino de crecimiento, su infancia y adultez se han desarrollado en su querido Santo Tomas, una comunidad de Miranda que hoy en día lo ve no solo como el medio para conocer lo que acontece en el mundo noticioso, sino a quien acudir a la hora de denunciar cualquier situación que los aqueja, pues como buen comunicador, tiene sus fuentes y contactos; y como no, también sus seguidores.
El portador de noticias
“Todo empezó cuando vendía periódico, la gente siempre me preguntaba que había de bueno en la prensa, y yo les contaba sobre las noticias que traía y la gente así se animaba a comprarlo”, contó.
Con el transcurso del tiempo la gente lo empezó a identificar como un comunicador popular y no solo le preguntaban qué había de bueno en el periódico, sino que además le contaban situaciones que ellos querían se hicieran públicas,
Aunque actualmente ya no trabaja como pregonero tras el cierre del medio en el que trabajaba, la gente lo sigue buscando para enterarse del acontecer diario. “Me dan la información, me llevan a los lugares donde está el problema, me pasan hasta las fotos o yo las tomo y la se las envió a los diferentes medios con los que he hecho enlace”, relató.
Su número de Whatsapp lo tiene medio pueblo, porque si te quieres enterar de lo que pasa en Miranda y sus alrededores, hay que consultar sus estados, tiene muy sus contactos en cuerpos de seguridad, medios de comunicación y hasta en la alcaldía, que lo mantienen al día.
Pese a que solo logró sacar su bachillerato por motivos económicos, anhela algún día poder estudiar una carrera referente a la comunicación social, “a mí me gusta informar a la gente, sobre todo a los viejitos que no tienen o no saben cómo meterse a internet”, expresó.