Según explican los expertos, lo ideal es que desde la preparación del café hasta su consumo no pase más de una hora. Sin embargo, no solo se debe tener en cuenta esto, sino también que hay un tiempo máximo para mantener el café en buen estado en la cafetera.
Sin embargo, cabe destacar que este proceso de oxidación no se detiene una vez preparada la bebida. Pasado el tiempo, la reacción entre el hidrógeno y el oxígeno da lugar a que se eleve el nivel de pH del café, y en consecuencia, aumenta el sabor amargo del café, señala El Español.
En este sentido, recalentar el café en el microondas es un grave error. De hecho, suele ocurrir que al calentar el café muy rápidamente, los pocos compuestos aromáticos que quedan en el café acaban desapareciendo y va a pasar a tener un sabor a quemado.
El café es un grano tostado que cuenta con unas propiedades que resultan de gran interés para la salud. Entre ellas podemos destacar las siguientes:
Ayuda a la hora de quemar grasas, por lo que puede ser de gran utilidad a la hora de seguir una dieta.
Contribuye a aportar nutrientes beneficiosos para la salud, sobre todo los antioxidantes que incorpora y que ayudan tanto a retrasar el envejecimiento como a proteger de diferentes problemas de salud.
Su consumo ayuda a prevenir problemas en el hígado y el corazón.
Reduce el riesgo de padecer algunos tipos de cáncer.
Gracias a la cafeína el cuerpo se despierta y se puede disfrutar de un extra de energía para poder hacer frente a largas jornadas de estudios o trabajo.
¿Cuando es contraindicado?
Existen algunos casos en los que el café no está indicado, y es que no todas las personas pueden consumirlo de forma habitual. Sus contraindicaciones son las siguientes:
Las personas que padecen de problemas gástricos como úlceras o síndrome del colon irritable deben evitar el consumo de café, incluso el descafeinado.
También debe ser evitado por quienes padecen de acidez estomacal.
Unas altas dosis de café pueden llegar a ocasionar dolor de cabeza y migrañas.
Se trata de un producto laxante, por lo que, si tienes algún problema de diarrea, no será recomendable su consumo.
Aumenta la presión arterial, por lo que debe ser restringido su consumo por parte de hipertensos.
Debe ser evitado por pacientes que tengan problemas en los riñones
