En el caso de los quirófanos, la escasez de insumos fue de 72%. Mientras que los que más escasean en los pabellones son la lencería, el material descartable para el personal médico y los analgésicos.
"Estas fallas hacen casi imposible realizar una cirugía, en particular las electivas", alertó la organización en el boletín difundido este 23 de marzo.
Si hay desabastecimiento de insumos, la única manera en que un paciente entre a los quirófanos es que los familiares compren lo que se necesita con su propio bolsillo.
"Muchos de estos insumos no son fáciles de conseguir, por su propia naturaleza. No hablamos de una pastilla que fácilmente se consigue en una farmacia, sino de insumos médico quirúrgicos que en teoría solo están disponibles para la compra institucional por parte de los hospitales", destacó la Encuesta Nacional de Hospitales.
Cabe mencionar que el monitoreo de 2022 mostró leves mejoras en el abastecimiento de insumos, según indicaciones del doctor Julio Castro, coordinador de la ENH. Sin embargo, expresó que el déficit todavía se mantiene.
"El simple hecho de que el paciente o sus allegados tengan que gastar dinero de su propio bolsillo para que pueda ser atendido, atenta directamente contra el principio de gratuidad que teóricamente rige el sistema de salud venezolano", expuso la organización.