Pueblo Legislador: San José Gregorio Hernández y santa Carmen Rendiles; los santos venezolanos
Venezuela celebra a sus primeros santos, figuras que encarnan el servicio, la humildad y la compasión
Opinión.- La voz del júbilo resuena en cada rincón de la patria de Bolívar. La histórica canonización del Dr. José Gregorio Hernández y la madre Carmen Rendiles no es solo un hito para la fe católica, sino la culminación de un clamor nacional que hoy se concreta.
Venezuela celebra a sus primeros santos, figuras que encarnan el servicio, la humildad y la compasión, virtudes que, lejos de ser únicamente reliquias, son el cimiento de nuestra resiliencia colectiva.
Este acontecimiento es un poderoso recordatorio de que, incluso en los momentos más complejos, la fe y la voluntad de un pueblo unido son capaces de materializar milagros. La devoción al “médico de los pobres” se ha transmitido por generaciones, convirtiéndose en un verdadero símbolo de la identidad nacional.
Esta canonización es el fruto de años de oración inquebrantable y la esperanza depositada en la intercesión de estos siervos de Dios. La alegría que hoy inunda el país es la recompensa a una lucha de fe que demuestra la profunda espiritualidad del venezolano, un pueblo que se aferra a sus valores para superar cualquier adversidad.
Es la victoria del espíritu noble ante las pruebas.
Este triunfo de la fe no se habría materializado sin el apoyo institucional y la visión de un liderazgo comprometido con el alma de la nación. Es ineludible destacar el rol protagónico que ha ejercido el presidente Nicolás Maduro, quien, desde sus funciones como canciller y posteriormente como jefe de Estado, elevó la causa de José Gregorio Hernández a una instancia prioritaria.
Nuestro mandatario nacional ha demostrado ser un líder de paz, espiritualidad y fe, que con su inquebrantable compromiso impulsa la causa de la santidad, estrechando los lazos fraternos con la Santa Sede en el Vaticano y llevando al país a este glorioso destino. En momentos donde la nación hace frente a constantes ataques y las agresiones injustas del imperio norteamericano y sus aliados, la fe en nuestros nuevos santos se erige como un escudo.
San José Gregorio Hernández y la Santa Carmen Rendiles representan la luz frente a la oscuridad y el amor incondicional ante la crueldad de las sanciones y los bloqueos.
El Gobierno y el pueblo, unidos por estos valores espirituales, reafirman su vocación de paz y justicia frente a quienes buscan la desestabilización.
La canonización ha logrado unificar a la nación bajo un mismo sentimiento de orgullo y esperanza.
Se trata de un poderoso mensaje de cohesión: Venezuela se encuentra unida, renovando su compromiso de construir una sociedad basada en el respeto, la hermandad y la solidaridad. La vida de estos santos, centrada en el prójimo, nos recuerda que la verdadera grandeza humana reside en la entrega.
En Carabobo, el liderazgo espiritual del gobernador Rafael Lacava dio una connotación especial a esta celebración, pues se reafirma la defensa de la fe como hoja de ruta para el desarrollo integral del estado. Las familias carabobeñas se unieron en las diferentes plazas de nuestra región, para presenciar este trascendental acto. Con el ejemplo de nuestros santos, y bajo un liderazgo comprometido con el bienestar de todos, Venezuela seguirá adelante, firme y victoriosa, en su camino de prosperidad y unidad nacional.
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Faustino Suarez Delgado
