Cápsulas Históricas: La persecución política a Fernández Morán
"Fernández Morán tuvo una muy cercana amistad con Marcos Pérez Jiménez hasta el día de su muerte"
Opinión.- Para quienes no lo conocen, Humberto Fernandez Morán fue uno de los grandes científicos del siglo XX, y su obra se conoce mucho más fuera de Venezuela que dentro del país, y eso tiene una razón elemental. El genio marabino, inventor del bisturí punta de diamante, y uno de los primeros expertos que ayudó en las patentes del microscopio electrónico, fue perseguido políticamente por los gobiernos de Rómulo Betancourt, Raul Leoni, entre otros.
¿La razón? Muy simple, Fernández Morán tuvo una muy cercana amistad con Marcos Pérez Jiménez hasta el día de su muerte, y durante el gobierno del militar andino, este científico fue uno de los grandes impulsores de los proyectos nacionales que dieron como resultado la construcción Reactor Nuclear del actual IVIC, así como el instituto que le dio nacimiento a todo esto. Incluso, Betancourt y sus seguidores durante esos tiempos lo criticaban de forma burlona llamándolo "el brujo de Pipe", porque todos estos proyectos científicos estaban construidos en lo que se conoce como los Altos de Pipe, en el estado Miranda.
Fernández Morán fue el último Ministro de Educación del gobierno de Pérez Jiménez antes del golpe militar de 1958, y con la caída del gobierno empezó una persecución y exilio contra él, a pesar de que en el mundo, las universidades más prestigiosas le ofrecían importantes cargos para dar clases o recursos para investigación. Incluso fue de los hombres en recibir las muestras de rocas extraídas de la Luna durante el alunizaje de 1969, también trabajó en el Proyecto Apolo desde 1970.
Las pocas veces que pisó Venezuela para brindar distintas cátedras en la década de los años 70 fue acosado y amenazado, y tuvo que irse para no volver jamás.
Parece muy tonto que el juego político privara a Venezuela de la genialidad de Fernández Morán, que sí fue aprovechada por otras naciones, pues no son muchos los científicos que le hemos dado al mundo, pero los pocos han sido grandiosos, y los gobiernos venezolanos de varias etapas no supieron sacarle provecho.
Durante el exilio de Pérez Jiménez en España, Fernández era un asiduo visitante para pasar navidades y distintas fiestas del año, algo que los partidos políticos en el poder jamás le perdonaron.
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Por Francisco Pérez Alviárez
