César Burguera: El sedicioso Ledezma y sus locales secuaces

"En una improvisada locación se producía una espontánea entrevista entre un desacreditado Antonio Ledezma"

29 de agosto de 2023

Opinión.- El retorno de la guarimba

En una improvisada locación se producía una espontánea entrevista entre un desacreditado Antonio Ledezma y su otrora compañera de luchas y hasta de vida, la desaliñada periodista Patricia Poleo, que sufre diariamente la cruel condena trasmitida por vía genética. En el elaborado encuentro, Antonio Ledezma, cuyos “inmaculados” yernos además de proporcionarle el respectivo aval moral y ético, por sus honestas trayectorias en el manejo del erario público, le sufragan todos los desproporcionados gastos en su idílica u ostentosa permanencia en el viejo continente. Un atolondrado Ledezma, a la sazón coordinador del Consejo Político Internacional del comando de María Corina Machado, llegaba a señalar que estaba en irreversible marcha, en nuestro país, un portentoso proceso de rebelión civil y militar. “Esta insurrección está concebida por María Corina y yo” espetaba el turbado entrevistado, mientras culminaba la jornada periodística con la lapidaria frase “Ese es nuestro plan, vamos a reeditar una nueva y fortalecida versión de “La Salida”, que otros incapaces e inútiles dirigentes opositores, en su momento, no pudieron concretar”. De esa manera se producía la “Proclama de Brickell” donde se retoma el sendero de conspiración, violencia y desestabilización como protagónico alegato, desdeñando, una vez más, el sendero de la vía constitucional y electoral. Una estupefacta Patricia Poleo no podía darle crédito a las irreverentes palabras y su regordete, su rollizo rostro abruptamente palidecía. Obviamente antes las desafiantes aseveraciones del coordinador del Consejo Político Internacional de María Corina Machado, salieron inmediatamente al paso, las principales referencias institucionales y políticas del país para levantar categóricamente sus voces ante la insensata e imprudente “Proclama de Brickell”. Surgía nuestro Alto Mando Militar, la más elevada instancia de nuestra Fuerzas Armadas Nacionales Bolivarianas, teniendo como insustituible vocero a Vladimir Padrino López para enfáticamente señalar “Ante estos llamados golpistas, nos corresponde responder de manera decidida y firme para derrotar la intriga y conspiración". Igualmente surgía el Fiscal General de la República, Tarek William Saab para informar al país sobre el inicio de una investigación contra Antonio Ledezma por las declaraciones emitidas que constituyen una clara afrenta a la democracia y se configura como traición a la patria. “Ledezma, habla sobre planes de María Corina para provocar una insurrección militar, desobediencia civil y por lo cual este prófugo de la justicia, debe responder ante la justicia venezolana”. Desde la estructura de la máxima expresión partidista del país, el PSUV, se presentaba la figura de su Vicepresidente, Diosdado Cabello para advertir “De ocurrir una acción militar, todos los que han pedido intervención contra Venezuela serán considerados como enemigos de nuestra patria y serán sometidos al debido tratamiento”. Y culminaba con la oportuna sugerencia “Estamos movilizados para defender la patria y la revolución contra los violentos, los terroristas y todos aquellos que no reconocen el Estado de Derecho, sino que prefieren la violencia, que no quede duda que la justicia les llegará”

Los locales secuaces

Varios de los cómplices de la “Proclama de Brickell” se pueden ubicar en Carabobo como elevados dirigentes de la azul tolda de Vente. Es volver a observar, con su trastornado semblante, al “Dopado Caminante”, Carlos Lozano aún sometido al demoledor tratamiento para hacerle médico frente a su recurrente patología del Síndrome del Trastorno Explosivo Intermitente, mejor conocido bajos las galenas siglas de (TEI). El iracundo Lozano fue unos de los principales promotores de actos que llevaban, como único argumento, la violencia y actos vandálicos. El “Dopado Caminante” se paseaba envalentonado, con su inseparable trusa de tonalidad rosada, por cada una de las guarimbas, esas mismas que cobraron la vida de innumerables victimas. Por ello una inusitada emoción penetraba o se introducía en su indómito espíritu, al escuchar acompañado de su inseparable pareja, ambos confundidos en delicada lencería, las palabras del sedicioso Antonio Ledezma convocando, nuevamente, a una rebelión militar y civil para derrocar al presidente constitucional Nicolás Maduro. Después de la “Proclama de Brickell”, Carlos Lozano, en intoxicada fase, realizó una extensa entrevista a una de las candidatas del confuso proceso primario para seleccionar el abanderado opositor al muy cercano evento eleccionario presidencial. Una inhabilitada María Corina llegaba a proporcionar un incondicional espaldarazo a las desatinadas palabras de Ledezma, la cual provocó un sodomita temblor en el famélico cuerpo del “Dopado Caminante”, quien llegaba a expresar, con voz entrecortada, “Así es Mari, tu supuesta inhabilitación es una manipulación y farsa por parte de estos loquitos que dirigen el país con rencor y alevosía, ante ello tenemos que retomar nuestra agenda, violencia y más violencia”. Raudamente se introducía en su violentada cavidad bucal, como suerte de improvisada celebración, un puñado de ansiolíticos, antidepresivos y una importante ración de litio. Otro de los efusivos pupilos de Ledezma y privilegiado directivo del andamiaje de Vente en Carabobo, es el supuesto empresario Smith Power Torres, cuya única credencial es haber sido principal financista del ex presidiario y criminal Gilber Caro en sus peripecias por promover acciones delictivas y facinerosas en contra de la estabilidad de la patria y del gobierno constitucionalmente establecido. El emprendedor Smith Torres no solo destinaba ingentes sumas de recursos para mantener la permanencia y vicios en las guarimbas, sino que prestaba su local comercial, estratégicamente ubicado en la avenida Bolívar de Valencia, para que fuera perfecta guarida de los desquiciados vándalos y como zona de aliviadero para ser depósito de todo tipo de armamento, pertrechos e importantes cantidades de psicotrópicas sustancias para asegurar la vigilia e intemperancia en aquellas zonas tomadas por la irracionalidad y atropello. La única intención es causar anarquía y caos. Estos son los dilectos discípulos del enajenado Antonio Ledezma y su “Proclama de Brickell”. Ante ello es necesario un inmediato pronunciamiento de los diferentes sectores opositores donde se desmarquen de esta nueva intentona de revertir la tranquilidad, paz y conciliación en Venezuela. La omisión y el silencio los convierte en inmediatos cómplices. Finalmente nuestra solicitud y exigencia al Ministerio Público, al diligente Fiscal General, Tarek William Saab para que realice un estricto seguimiento a las retorcidas y expuestas conductas de este dueto de reconocidos conspiradores. ¡Sin contemplaciones poeta! Y esa es la verdad.