Cita con la Historia: Casa León, enchufado y camaleón
"En la política y en casi cualquier aspecto de la vida humana hay unos personajes que tienen una habilidad extraordinaria"
Opinión.- En la política y en casi cualquier aspecto de la vida humana hay unos personajes que tienen una habilidad extraordinaria para cambiarse de bando y continuar disfrutando de las mieles del poder sin que los afecten los avatares políticos. Son lo que comúnmente llamamos “camaleones”. Quizás uno de los casos más notables es el del Marqués de Casa León.
Antonio Fernández de León, llega bastante joven a Venezuela, donde ya se habían establecido sus familiares, quienes desempeñaban importantes cargos militares y en la hacienda pública. Antonio adquiere buenas haciendas en los Valles de Aragua y se convierte en un rico exportador.
Se inaugura en la política organizando en 1806 una milicia para combatir la tentativa de Francisco de Miranda.
Luego, en 1808 junto con los mantuanos de Caracas forma parte de un fracasado movimiento que luego llamaron “la revolución de los mantuanos” que pretendía nombrar una junta para garantizar la soberanía del estado, en tiempos en que el rey Fernando VII estaba preso por Napoleón. Por esto fue enjuiciado y llevado a España donde fue hábilmente defendido por un hermano suyo y sale absuelto. En España aprovecha y compra el título de “Marqués de Casa León” convirtiéndose en uno de los pocos nobles de Venezuela.
Regresa a Venezuela y luego del 19 de abril de 1910 el nuevo gobierno lo designa presidente del Tribunal de Apelaciones. Más tarde, en 1812, ya declarada la República, Miranda (quien había sido su adversario en 1806) lo designa director de Rentas, pero Miranda es rápidamente derrotado y designa a Casa de León para negociar con el general realista Monteverde la capitulación. Preso Miranda, el marqués trata de demostrar la participación del Generalísimo en la sustracción de fondos públicos y delata a quienes fueron sus compañeros en la tentativa de independencia.
Con los realistas nuevamente en el poder, Monteverde lo designa intendente del ejército y de hacienda. Pero en 1813 viene Bolívar arrasando con su “Campaña Admirable” y toma el poder, declaran nuevamente la república y ocupan Caracas. Lo realistas capitulan y el representante de Monteverde que firma la rendición ante Bolívar es el propio Casa León.
Ahora es Bolívar el que lo designa director de rentas, por lo visto, el hombre siempre está en los cargos de hacienda, cargo que abandona en enero de 1814. Poco tiempo después los realistas bajo el mando del terrible José Tomás Bóves destruyen la república y toman Caracas. Es ahora Bóves quien incorpora al gobierno al marqués como jefe político de la provincia y presidente del Tribunal Supremo. Muerto Bóves, en 1815 llega al país el general Pablo Morillo, quien envía al marqués a España, para que rinda cuentas de su actuación junto a los republicanos. En la corte Casa León nuevamente es defendido con habilidad por su hermano, quien logra que salga absuelto. Regresa el marqués a Venezuela, ya Morillo se ha ido y La Torre es el capitán general y designa al personaje como jefe político de Venezuela, pero La Torre es derrotado en Carabobo en 1821 y los patriotas toman el control total del país, por lo que Casa León se refugia en Curazao, a la espera de una reconquista y recuperar sus ricas haciendas y su poder político. Pero ya no habrá más dominio español en Venezuela. Viene Páez y ordena el embargo de las ricas haciendas y posesiones de Casa León y de paso logra que se las adjudiquen a él como haberes de guerra. El rico marqués queda sin su fortuna y va a vivir a Puerto Rico, donde se mantiene con una pensión que le envía desde Venezuela la mantuana María Antonia Bolívar, por órdenes de su hermano…Simón. Así son las cosas.
Por Luis Heraclio Medina Canelón
M.C. de la Academia de Historia del Estado Carabobo.
