A partir del 10 de Marzo del año 1955, se celebra o conmemora el Día del Médico en Venezuela, luego que una Asamblea Extraordinaria de la Federación Medica Venezolana, tomará esa decisión, en honor al natalicio del ilustre Dr. José María Vargas que nació en la Guaira el 10 de Marzo de 1786.
Es indudable el amplio curriculum, de este honorable médico que dejó una huella imborrable dentro y fuera de Venezuela.
Médico Cirujano, científico, catedrático de la Universidad de Caracas, político, escritor y presidente civil de Venezuela.
Perteneció al Partido Conservador de aquella época, y al movimiento que libró la lucha por la independencia del país.
Fueron muchos sus logros, que no alcanza este artículo a señalar. Fue fundador de la Facultad de Medicina de la Universidad de Caracas, ahora Universidad Central de Venezuela. Además rector de esa casa de estudios, donde demostró manejo honesto y eficaz de los recursos financieros. Fundador también de la Sociedad Medica de Caracas en 1827, y de la cátedra de cirugía en 1832.
A la par de su intensa actividad docente, académica y científica, actuó en la política. Fue miembro diputado del Congreso Constituyente de 1830, en el cual realizó una intensa actividad parlamentaria.
Fue electo presidente de Venezuela en 1834, voto ratificado por el Congreso el 6 de febrero de 1835, iniciando su período presidencial el 9 de ese mes, interrumpido por un movimiento insurreccional militar denominado "La Revolución de las Reformas" del 8 de julio al 20 de agosto de 1835, cuando recuperó la presidencia, gracias a la acción militar dirigida por José Antonio Páez. A pesar de haber obtenido un triunfo civil al derrotar a los miliares reformistas, renunció el 24 de abril de 1836.
Luego de esta agitada pasantía en la presidencia de la república, se dedica por entero a la educación y docencia hasta 1853, cuando producto de una enfermedad viajo a Filadelfia y luego a Nueva York donde murió el 13 de julio de 1854 cuando apenas tenía 68 años.
Hoy conmemoramos el Día del Medico, en una terrible crisis sanitaria nunca vista en el país, en los años de democracia civil. Las razones son múltiples, controversiales y debatibles. Para los oficialistas del gobierno son las sanciones, que sin duda alguna la han agravado, pero ya las verdaderas causas existían, para el momento cuando se aplicaron al país estas medidas.
Puedo señalar sin temor a equivocarme que la desidia, corrupción, falta de presupuesto y meritocracia le asestaron un duro golpe a la salud.
Recuerdo, que cuando Chávez llego al poder, instituciones como la del Seguro Social, Ipasme y Hospitales Militares, tuvieron que abrir sus puertas para una atención abierta a todo público ( ojo, estamos de acuerdo con una salud universal e igualitaria ) pero sin incrementar sus presupuestos de funcionamiento, lo que trajo consigo fue la progresiva pérdida de calidad de sus servicios. Se designaron directores de hospitales y ambulatorios a personas que en muchísimos casos eran militares, que no sabían nada de administración de esos centros, ni tenía formación en salud pública.
Se creo una red paralela de salud denominada "Barrio Adentro" descuidando la red tradicional de salud, resultando al final que ambos sistemas colapsarán y no dieran las respuestas oportunas y eficientes a los problemas de la población.
Otro importante aspecto a señalar es la opacidad informativa sanitaria, el Boletín Epidemiológico no se pública desde 2016, cuando una ministra o sus subalternos lo publicaron y fue motivo de expulsión de su cargo. Ya para ese entonces antes de las sanciones y la pandemia, y de venir de la época de bonanza que tuvo el país, los indicadores de salud eran alarmantes en mortalidad materno infantil, y reaparición de enfermedades que habían sido erradicadas por la democracia civil venezolana.
Hoy nos toca a todos hacerle un reconocimiento a todo el personal de salud, en este Día del Médico, que con valentía, coraje, esfuerzo, sacrificio, han permanecido de pie frente a las adversidades que hoy presenta el país en el aspecto socio económico actual y la pandemia.
Ha habido deserción en nuestros hospitales y ambulatorios, producto de la diáspora , consecuencia directa de los bajos salarios, inseguridad en los centros hospitalarios, deterioro de la infraestructura, falla de insumos y medicamentos.
Aspiramos que con este nuevo incremento de los precios petroleros, se pueda disponer de un fondo especial de emergencia nacional por la vía de los ingresos extraordinarios, para paliar la crisis sanitaria del país. Seguimos apostando a Venezuela.
Por Rubén Limas