La iniciativa, impulsada por el senador Jota Pe Hernández, busca asegurar que la figura de Uribe Turbay no caiga en el olvido, otorgándole varios honores que se harían tanto en el Capitolio como en la ciudad de Bogotá.
El proyecto, que ahora deberá surtir el trámite legislativo correspondiente, propone una serie de acciones simbólicas y permanentes. La principal de ellas es la instalación de una placa conmemorativa en el interior del Congreso. Esta placa, cargada de significado, se ubicaría de manera especial a las afueras de la oficina que alguna vez ocupó Uribe Turbay, sirviendo como un recordatorio constante de su dedicación y servicio en el lugar donde desarrolló su labor política.
El proyecto también contempla una intervención en el espacio público de la capital. Hernández propuso la construcción y colocación de un busto de Miguel Uribe Turbay en el parque en donde fue atentada la vida del senador, ubicado en el barrio Modelia. Para reforzar el tributo y resignificar el lugar, la iniciativa incluye el cambio de nombre del parque, el cual pasaría a llamarse “Parque Miguel Uribe Turbay”, transformando un sitio de dolor en un punto de recuerdo y honor.
Adicionalmente, el proyecto de ley propone un reconocimiento dentro de la estructura misma del Congreso. El salón de reuniones de la Comisión Tercera, de la cual Uribe Turbay era miembro, sería rebautizado como “Salón de sesiones Miguel Uribe Turbay”.
La propuesta, que llega en un momento de sensibilidad política, refleja el deseo de sus colegas de honrar a un hombre que, en palabras del senador Hernández, "fue una figura dedicada y comprometida con el país".
La iniciativa tendrá que ser discutida y votada en las respectivas comisiones y plenarias para convertirse en una ley de la República.
El futuro de este homenaje está ahora en manos del poder legislativo, que tendrá la responsabilidad de decidir si estos honores se concretan para honrar al político.