Condenan a 20 años de cárcel a Joël Le Scouarnec por abuso sexual de 299 pacientes, la mayoría menores
Los hechos ocurrieron entre 1989 y 2014 cuando las víctimas se encontraban bajo anestesia o al despertar de operaciones
Internacional.- Veredicto contra el llamado “diablo de la bata blanca”. Joël Le Scouarnec, de 74 años y cirujano retirado, fue condenado este miércoles 28 de mayo a 20 años de cárcel tras admitir haber abusado sexualmente de decenas de pacientes durante más de dos décadas. Entre sus víctimas se encontraban menores de edad.
Termina así el juicio por uno de los casos de abuso infantil más grande del territorio francés. El fallo llega luego de que los jueces siguieran las recomendaciones de la Fiscalía con respecto a la duración de la condena y el tribunal penal de Morbihan ordenó que Le Scouarnec cumpliera al menos dos tercios de la sentencia antes de poder optar a la libertad.
En el juicio, que comenzó el pasado febrero, el hombre admitió haber agredido sexualmente o violado a 299 pacientes —256 de ellas menores de 15 años— en hospitales del occidente de Francia.
Los hechos ocurrieron entre 1989 y 2014 y gran parte de las agresiones sexuales tuvieron lugar mientras las víctimas se encontraban bajo anestesia o al despertar de operaciones.
Le Scouarnec fue acusado de 111 violaciones y 189 agresiones sexuales y se perfila como uno de los depredadores sexuales convictos más prolíficos de la historia del país.
Las víctimas han sido representadas por unos 60 abogados.
El hombre ya se encuentra en prisión luego de haber sido condenado a 15 años de prisión, en 2020, por violar y agredir sexualmente a cuatro menores, incluidas dos de sus sobrinas.
Acusaciones de inacción
Las víctimas y sus familias han cuestionado públicamente por qué las autoridades sanitarias locales y nacionales no detuvieron a Le Scouarnec. Y es que en 2005, fue condenado por descargar imágenes de abuso sexual infantil y recibió una pena de prisión suspendida, pero logró seguir trabajando en hospitales públicos.
En aquel momento, no se tomaron medidas para suspender su licencia médica ni limitar su contacto con menores y Le Scouarnec continuó con sus abusos en hospitales hasta su arresto en 2017.

"
¿Debería Joël Le Scouarnec haber sido el único en el banquillo de los acusados?", cuestionó el fiscal Stéphane Kellenberger durante sus alegatos finales.
"Se podría haber hecho más (...) Se podrían haber hecho las cosas de otra manera, incluso dentro de los infames estratos de la burocracia francesa, donde las responsabilidades a menudo se transfieren de una autoridad a otra hasta que, finalmente, esa responsabilidad se pierde y afecta a vidas inocentes", agregó Kellenberger.
"Este juicio, que podría haber servido como laboratorio al aire libre para exponer las graves fallas de nuestras instituciones"
Le Scouarnec ha confesado todos los abusos sexuales alegados por las 299 partes civiles, así como otras agresiones que ya han prescrito.
También, en una impactante confesión durante el juicio, reconoció haber abusado sexualmente de su nieta, una declaración hecha ante sus padres, visiblemente consternados.
Las víctimas de Le Scouarnec se han quejado de una aparente falta de atención.
“Este juicio, que podría haber servido como laboratorio al aire libre para exponer las graves fallas de nuestras instituciones, parece no dejar huella en el gobierno, la comunidad médica ni la sociedad en general”, señaló un grupo de víctimas en un comunicado.
"Soy consciente de que el daño que he causado es irreparable"
Los abusos sexuales que Le Scouarnec cometió contra sus pacientes, muchos de ellos niños en aquel entonces, son considerados como el peor caso de pedocriminalidad en Francia que ha llegado a juicio.
"Soy consciente de que el daño que he causado es irreparable", declaró Le Scouarnec en la apertura de su juicio el pasado febrero.
"Le debo a todas estas personas y a sus seres queridos admitir mis actos y sus consecuencias, que han sufrido y seguirán sufriendo toda su vida", añadió.
El proceso judicial tuvo lugar en un momento de consternación en el país sobre los delitos sexuales tras la condena de Dominique Pelicot, declarado culpable en diciembre de 2024 de drogar a su entonces esposa, Gisèle Pélicot, hasta dejarla inconsciente e invitar a decenas de hombres a su domicilio para violarla.
Víctimas y defensores de los derechos de los niños subrayan que el caso del cirujano pone de relieve las deficiencias sistémicas que permitieron a Le Scouarnec cometer delitos sexuales de forma reiterada.