Mediación Papal entre Ucrania y Rusia quedó cancelada: Esto es lo que se sabe
El líder ruso no confía en la Iglesia católica como mediadora
Internacional.- A través de un backchannel diplomático que une El Vaticano con el Kremlin, León XIV confirmó que Vladimir Putin no aceptaba sus buenos oficios para lograr un cese del fuego entre Ucrania y Rusia.
La negativa de Putin implosionó un audaz movimiento respaldado por Estados Unidos y la Unión Europea. Con el mandato de estos bloques geopolíticos, la premier italiana Georgia Meloni intentó articular una mesa de diálogo que permitiera fijar una tregua entre Kyiv y Moscú.
Pero Putin se mostró inflexible respecto al Vaticano, y todo quedó en la nada. El líder no confía en la Iglesia católica como mediadora, y detrás de este argumento político se esconde una lógica de negociación que anula las posibilidades de un próximo cese del fuego.
Rusia pretende que Ucrania ceda la Península de Crimea y las regiones de Donetsk y Lugansk, Kherson y Zaporiyia, renuncie a integrar la OTAN, y que la Unión Europea descarte desplegar tropas a las órdenes de Kyiv para evitar una nueva ofensiva del Ejército Rojo.
Estas exigencias de Putin son rechazadas por Volodimir Zelenski, mientras que Donald Trump se mostraba inclinado a aceptar la propuesta del presidente ruso.
En este contexto, la premier Meloni dialogó con Trump, compartió esa charla con Emmanuel Macron (presidente de Francia) y Friedrich Merz (canciller alemán), y conversó con Zelenski para definir una hoja de ruta.
Con todos a bordo, Meloni llamó por teléfono a León XIV. El Papa asumió la compleja situación, y de todas maneras se puso a disposición para encontrar una solución al conflicto que ya ha dejado miles de muertos en ambas trincheras.
“Estamos trabajando para iniciar inmediatamente negociaciones entre las partes que puedan conducir a un alto el fuego lo antes posible y crear las condiciones para una paz justa y duradera en Ucrania”, posteó Meloni en su cuenta de X, cuando concluyó su ronda de consultas diplomáticas.
Y completó: “En este sentido se consideró positiva la disponibilidad del Santo Padre a acoger los coloquios en el Vaticano. Italia está dispuesta a hacer su parte para facilitar los contactos y trabajar por la paz”.
Tres días después de ese posteo de Meloni, El Vaticano fue informado por el Kremlin que no se consideraba su mediación para acordar una tregua.
Desde Moscú se alegaron razones religiosas y políticas, que en Roma fueron consideradas una tapadera pars esconder la negativa a un diálogo de paz con Ucrania.
“Es poco realista”, dijo el canciller ruso Sergei Lavrov al considerar la oferta de mediación del Vaticano. Esa declaración de Lavrov funcionó como un certificado de defunción para la primera jugada de diplomacia global que intentó protagonizar León XIV.
Hace una semana, Trump dialogó con Putin por casi tres horas. El presidente de los Estados Unidos adelantó que se habían acercado posiciones, ante la cautela de Zelenski y la Unión Europea, que juega casi sin fisuras al lado de Ucrania.
Putin desmintió a Trump en escasas horas. Y a continuación inició una profunda ofensiva bélica que anoche fue condenada por Trump en sus redes sociales.
“Siempre he tenido una muy buena relación con Vladimir Putin de Rusia, pero algo le ha pasado. ¡Se ha vuelto completamente LOCO!”, escribió Trump en su red Truth Social. “Están disparando misiles y drones contra ciudades de Ucrania sin ningún motivo”, añadió.
A estas horas, ya no hay escenario de negociación.
La vía papal quedó cancelada, la hipótesis de un encuentro en Suiza aún es improbable y no hay indicios de un eventual cónclave en Turquía.
Trump ahora analiza imponer nuevas sanciones a Rusia para traer a Putin a la mesa de negociación. Una movida que Moscú podrá atenuar con el respaldo constante de China, Irán y Corea del Norte.