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El ministro del Interior Daniel Palacios, la directora del ICBF Lina Arbeláez y la jefe de gabinete María Paula Correa, fueron los encargados de presentar esta iniciativa, con la que se pretende otorgarles los mismos derechos que tienen todos los ciudadanos colombianos, para que puedan acceder a servicios como la salud, la educación, entre otros.

El ministro Palacios explicó que “se busca que el Congreso de la República haga ley que más de 1.200 niños que en este momento se encuentran en custodia del (ICBF), que han sido abandonados, que no tienen familia y que se encuentran bajo la custodia del ICBF, reciban la nacionalidad colombiana para que puedan tener acceso a todos los derechos, garantías y protección de la Constitución”.

“Con esto buscamos garantizar que puedan estar en los hogares del Bienestar Familiar con patria potestad para poder garantizarles la protección y el ejercicio pleno de sus derechos”, explicó.

Dijo que también se radicará mensaje de urgencia para que la iniciativa salga adelante en las Comisiones Segundas conjuntas de Senado y Cámara y posteriormente en las plenarias de las dos corporaciones lo antes posible.

“Este proyecto tendrá mensaje de urgencia debido a la situación que viven estos más de 1.200 niños que han sido abandonados, muchos llevan más de 18 meses en esta situación, algunos más de tres años que se encuentran en situación de abandono y desprotección y aunque están en el ICBF, hoy no tienen garantías ni plenos derechos”, sostuvo.

El representante Edward Rodríguez, quien firmó la iniciativa como coautor, explicó que se trata de un proyecto muy importante en materia de política social y explicó qué beneficios tendrían tras recibir la nacionalidad.

“La nacionalidad es una órbita jurídica que le permiten acceder a derechos como la salud, educación, vivienda, pero ante todo protección integral por parte de un Estado, en este caso el Estado colombiano no tenía esa garantía para darle a muchos niños que están abandonados en la calle y con esta legislación lo que hacemos es cubrirlos y cumplir un mandato de la Unesco”, anotó.

La nacionalidad también le permitiría al Bienestar Familiar dar estos menores en adopción, para seguir garantizando su protección integral. (RCN)