En la demanda, TikTok y ByteDance alegan que la ley viola los derechos de la Primera Enmienda de los usuarios. Además, las empresas sostienen que se trata de una "extraordinaria e inconstitucional afirmación de poder" basada en preocupaciones de seguridad nacional vagamente expresadas.
"Prohibir TikTok es tan obviamente inconstitucional, de hecho, que incluso los patrocinadores de la Ley reconocieron esa realidad, y por lo tanto han tratado poderosamente de describir la ley no como una prohibición en absoluto, sino simplemente como una regulación de la propiedad de TikTok", señala la impugnación.
"En realidad, no hay elección", añade. Una venta forzosa "no es posible: ni comercial, ni tecnológica, ni legalmente", defiende la demanda.