Además, el azote de Otis afectó los servicios de alerta sísmica en tres estados del Pacífico mexicano: Michoacán, Guerrero y Oaxaca, principales epicentros de sismos en el país.
Por un lado, el Sistema de Alerta Sísmica Mexicano (Sasmex) indicó qué el impacto de Otis impidió la comunicación de 27 sensores en esta región del océano Pacífico.
“En caso de que ocurriera un sismo fuerte, próximo a los sensores afectados, no se podrá emitir un aviso de alerta sísmica”, advirtió.
Para atender esta problemática el Gobierno de México envió una brigada de más de 900 trabajadores, 60 vehículos y más de 200 equipos de maquinaria pesada.
Por su parte, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) activó las comunicaciones para casos de emergencia con los operadores de los servicios de telecomunicaciones y de radiodifusión en el país.
Inundaciones y daños
Inundaciones de edificios y daños en carros y en objetos de vidros disparados por el aire a causa del viento huracanado son algunos efectos del fenómero natural. Hasta el momento no se han reportado víctimas.
Igualmente las autoridades mexicanas, a través de la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC), dio a conocer que el Aeropuerto Internacional de Acapulco suspendió sus operaciones hasta nuevo aviso, tras estas afectaciones del Huracán Otis.
Evolución de Otis
El domingo 22 de octubre en la tarde fue la primera vez que confirmaron que Otis era tormenta tropical, sin embargo, en cuestión de 48 horas llegó a ser huracán en su máxima categoría, dejando vientos potentes y un oleaje devastador.