Escándalo en Perú: Desmantelan una red que vendía recién nacidos
Al parecer los menores eran vendidos en el extranjero y además comercializaban fetos para rituales
Internacional.- Autoridades de Perú descubrieron una red dedicada al tráfico de bebés recién nacidos en la ciudad de Cusco, al parecer los menores eran vendidos en el extranjero, principalmente a países de Europa, además comercializaban fetos, los cuales se dice eran usados para rituales.
Esta red de tráfico de bebes salió a la luz luego que las autoridades detuvieron a Fanny Hurtado Altamirano, quien intentó hacerse pasar por la madre de un bebé en un centro médico en Cusco.
Actualmente, Hurtado se encuentra bajo detención preventiva en la prisión local, mientras los investigadores indagan sobre sus múltiples salidas del país, sin registros de sus regresos.
Según los informes preliminares, Hurtado realizó varios viajes internacionales durante el último año, lo que ha llevado a sospechar que se hacía pasar por madre de bebés para luego venderlos a familias europeas.
¿Cómo conseguían a los bebés para venderlos?
La mujer solía visitar con regularidad un centro obstétrico clandestino en Cusco, donde se realizaban abortos. Al parecer, el modus operandi del centro era persuadir a las madres para que no interrumpieran sus embarazos y, en su lugar, entregaran a sus bebés a mujeres que no podían concebir.
Además de Hurtado, autoridades también detuvieron a Rosa Huayhua quien la acompañó al hospital de Cusco cuando la mujer se hacía pasar por la madre del menor. Cabe indicar que sorprendentemente, Lizeth Zambrano Huayhua, la hija de Rosa, resultó ser la directora del centro médico clandestino donde encontraban a sus víctimas.
Lizett Blanca Zambrano, graduada en obstetricia, se encargaba de gestionar toda la documentación, elaborando certificados y firmando sin verificar el origen ni la identidad de las madres biológicas de los recién nacidos.
Vendían fetos para rituales en Perú
Las investigaciones sugieren que esta banda vendía a los bebés por cifras que oscilaban entre los 100 y 200 dólares, y se presume que otras personas podrían estar involucradas en esta red de tráfico de personas, por lo que las autoridades siguen investigando.
Las autoridades locales descubrieron en la propiedad recibos de pago de instituciones bancarias, efectivo, números de teléfono, equipos de ecografía y un espacio destinado a procedimientos abortivos.
Incluso se ha mencionado que podrían haber estado involucrados en la comercialización de fetos para rituales. Otro aspecto alarmante es que, en caso de que los bebés presentaran deficiencias, se ponía fin a sus vidas.
Luego que las autoridades de Perú descubrieran esta red de tráfico de bebés recién nacidos, los expertos continúan con las investigaciones para dar el origen de los bebés y el paradero de sus padres biológicos.
