"Ayuda al amado pueblo ucraniano en el camino hacia la paz e infunde la luz pascual sobre el pueblo ruso. Consuela a los heridos y a los que han perdido a sus seres queridos en la guerra, y haz que los prisioneros puedan volver sanos y salvos con sus familias", dijo el pontífice desde la logia central de la basílica de San Pedro.
"Abre los corazones de toda la comunidad internacional para trabajar por el fin de esta guerra y de todos los conflictos que tiñen de sangre el mundo", rogó antes de impartir la bendición Urbi et Orbi ante 100 mil fieles congregados en las inmediaciones de la plaza San Pedro, según el Vaticano.