Previamente como baterista de Kingdom Come, y también en otros grupos como como Krunk, Montrose o Wild Horses, el periodo de mayor éxito como músico de Kottak fue durante su gran salto adelante junto a Scorpions, con quien tocó durante dos décadas, desde 1996 a 2016, cuando la banda decidió apartarle por sus graves problemas de alcoholismo.

Por el momento no han trascendido las causas del fallecimiento de Kottak, pero el portal 'Metal Sludge', el primero en dar la noticia del fallecimiento, asegura que el batería fue hallado sin vida en un baño de su casa en su ciudad natal de Louisville, Kentucky (EE.UU.). "Se cree que Kottak murió de un aparente paro cardíaco", recoge esta web.

"Muy triste noticia... nuestro querido amigo y baterista durante 20 años James Kottak falleció a la edad de 61 años. James era un ser humano maravilloso, un gran músico y un amoroso hombre de familia. Él era nuestro 'hermano de otra madre' y lo extrañaremos mucho. Rock'n Roll para siempre", han tuiteado desde la cuenta oficial Scorpions para despedirse de su exmiembro.

En una entrevista de abril del año pasado en 'Tulsa Music Stream', Kottak reconoció su lucha contra la adicción al alcohol: "He tenido algunos problemas con el alcohol a lo largo de los años. Pero lo que la gente no sabe es todos los años que estuve sobrio: de 2008 a 2011, por ejemplo, y un año suelto aquí y otro allá…, también cuando criábamos a nuestros hijos estuve mucho tiempo sin beber… Cuando he bebido, no significa que me iba cayendo borracho por todos lados o que siempre fuera por la casa con una botella en la mano", dijo Kottak.