En Venezuela, su carrera fue igualmente significativa. Jugó seis temporadas en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP), vistiendo los uniformes de los Navegantes del Magallanes, los Cardenales de Lara y las Águilas del Zulia. En cada equipo dejó muestras de su talento ofensivo, especialmente con los pájaros rojos, y su compromiso con la pelota criolla.
Más allá de los números, Jesús Montero fue símbolo de perseverancia. Su tránsito por Ligas Menores, su lucha por mantenerse en la élite, y su entrega en cada turno al bate reflejan el espíritu de miles de peloteros que sueñan con triunfar desde los diamantes venezolanos.
Hoy, el beisbol llora su partida. Pero también lo recuerda con gratitud: por cada jonrón que hizo vibrar a los fanáticos, por cada jornada en la que defendió con orgullo los colores de su país, y por cada joven que vio en él un ejemplo de que los sueños pueden alcanzarse.
La LVBP envía sus sinceras palabras de condolencias a sus familiares, amigos y compañeros de equipo. Que su memoria sea luz y que su historia siga inspirando a futuras generaciones.