Sus primeros pasos en el deporte los dio en el tenis tradicional el cual forjó su disciplina y competitividad; pero a los 15 años descubrió el tenis de playa del que se enamoró rápidamente. Es así como a los 17 participó en su primer torneo profesional en Aruba.
En noviembre de 2018 representó a la Selección Nacional de Venezuela en los Juegos Panamericanos donde ayudó a su equipo a llegar a cuartos de final, antes de caer ante Brasil. Al año siguiente, es decir, en el 2019 fue preseleccionada para los Juegos Suramericanos de Playa en Rosario, Argentina, reafirmando así su estatus como una de las mejores atletas del país.
Notable trayectoria
Más de 45 torneos de ITF y su participación en más de 50 eventos nacionales e internacionales, logrando posicionarse constantemente en los circuitos, es un abreboca de la notable trayectoria de Luisiana Ramírez en el tenis de playa. En 2023, alcanzó su mejor ranking hasta la fecha: el número 3 en Venezuela y el 69 en el mundo.
Además de sus logros en la cancha, Ramírez ha impactado como entrenadora y mentora, contribuyendo al crecimiento del tenis de playa a nivel global trabajando con academias de renombre entre las que destacan: La Iguana y Grip (Club Italo-Venezolano) en Venezuela; Caribbean Beach Tennis School en Aruba; Sandpoint Sport and Fitness y WOW Beach Tennis Academy en Estados Unidos; así como en clínicas en Puerto Rico.
La credibilidad de la joven tenista venezolana se ve reforzada por las figuras con las que ha entrenado y competido, incluyendo a Carlos Vigon (N° 23 del mundo) y Patricia Díaz, ex número 1 del mundo.
Sin embargo, el camino de Luisiana Ramírez no ha estado libre de desafíos, pues en julio de 2023, durante una final de un ITF BT50 en Puerto Rico, sufrió una grave lesión en la rodilla izquierda, pero tras meses de rehabilitación, logró regresar al mismo torneo en enero de 2025, donde quedó subcampeona luego de un super tie-break contra el equipo local, que está entre los 30 mejores del mundo.
Perseverancia y liderazgo
La trayectoria de Luisiana Ramírez, marcada por victorias, reveses y remontadas extraordinarias, sigue inspirando a la comunidad mundial del tenis de playa. La joven venezolana es más que una atleta: es un símbolo de perseverancia, liderazgo y reconocimiento internacional. Su historia ilustra las cualidades que definen al talento de talla mundial: habilidad, resiliencia y la capacidad de inspirar a través de las fronteras.
Con la mira puesta en ascender en el ranking internacional y expandir el alcance del deporte, Ramírez representa la esencia misma de la excelencia atlética: una auténtica embajadora del tenis de playa y una gran persona dentro y fuera de la cancha.