La federación estadounidense ha destacado que su candidatura para 2031 buscará que la FIFA invierta de manera equitativa en las Copas del Mundo masculinas y femeninas. Esto surge en un contexto donde la FIFA destinó una cantidad considerablemente mayor en premios para la Copa del Mundo masculina de 2026 en comparación con el Mundial femenino del año pasado.
Cindy Parlow Cone, en un comunicado, mencionó que cambiar la candidatura permitirá organizar una Copa Mundial Femenina sin precedentes en 2031, con el objetivo de impulsar el crecimiento y elevar el nivel del fútbol femenino a nivel nacional e internacional.
En sus propuestas anteriores, la USSF incluyó sitios estadounidenses que también serán utilizados en la Copa Mundial masculina de 2026, mientras que México consideró sedes como Guadalajara, Ciudad de México, Monterrey, León y Querétaro para el torneo femenino de 2027.