La del miércoles fue una tarde movida en Can Barça. Después de la junta directiva, Deco, director deportivo del FC Barcelona, se reunió en la Ciutat Esportiva Joan Gamper con Xavi Hernández y su asistente y hermano Òscar Hernández. Tras este encuentro, tanto el portugués como el entrenador se desplazaron a la casa del presidente Laporta, donde les esperaba el presidente y el vicepresidente deportivo, Rafa Yuste.
MD ya explicó la semana pasada que, tras el Clásico, habría una reunión decisiva del presidente con Xavi y Deco. Así fue. En la cumbre también estuvo Alejandro Echevarría, hombre de máxima confianza del presidente y con ascendencia en las decisiones del club.
Tras dos horas de reunión, y después de hablar de todos los detalles, las dos partes acordaron que Xavi Hernández siga hasta junio de 2025, que es cuando concluye su contrato. No hay que olvidar que ese acuerdo incluye también otro año opcional a voluntad del club.
Una vez se pactó la continuidad de Xavi, avanzada por Mundo Deportivo en su web, se sumaron a la reunión el directivo Joan Soler, además de Enric Masip, adjunto a la presidencia, y Bojan Krkic, ayudante de Deco en la dirección deportiva.
Los últimos en sumarse a la cena de celebración por la continuidad de Xavi fueron el tesorero Ferran Olivé y el vicepresidente de márketing, Juli Guiu. Ante tantos comensales, fueron varios los repartidores de comida que llegaron hasta el domicilio del presidente Laporta, con 'sushi' como parte del ágape.
El entrenador se fue sin hacer declaraciones y fue el vicepresidente Rafa Yuste, uno de los grandes valedores del técnico, quien habló sobre su continuidad.