Su debut internacional en los Juegos de Barcelona lo catapultó a una exitosa carrera arbitral que incluyó participaciones en Juegos Olímpicos, Campeonatos del Mundo y de Europa.
Además de su labor en el arbitraje, Borrell desempeñó roles clave en la Federación Catalana de Natación y la Real Federación Española de Natación, contribuyendo al desarrollo y promoción del waterpolo en España y a nivel internacional. Su legado perdurará en la comunidad waterpolística, recordado por su pasión y compromiso con este apasionante deporte.