La evolución de los estilos de juego en el fútbol
El juego ha cambiado en muchos sentidos, desde la formación y habilidades de los jugadores, hasta los sistemas tácticos y estilos de juego empleados
Deportes.- El fútbol apasiona a millones de fanáticos. Este deporte es capaz de movilizar multitudes. Sin embargo, el espectáculo vistoso que conocemos hoy difiere muchísimo de lo que era en su origen. El juego ha cambiado en muchos sentidos, desde la formación y habilidades de los jugadores, hasta los sistemas tácticos y estilos de juego empleados en los partidos de fútbol.
Fútbol primitivo
En sus inicios, los partidos de fútbol eran verdaderas batallas campales. La rudeza y la falta de un reglamento le restaban deportividad. En 1863 se estableció en once el número de jugadores en la cancha, de los cuales solo uno podía tocar el balón con los pies. Entonces nació el primer sistema táctico de la historia: un arquero y diez atacantes. Algunos equipos utilizarían una segunda línea, colocando a un defensor entre portero y delanteros.
Los primeros años fueron dominados por una mentalidad ultraofensiva, basada en acciones individuales de jugadores que recorrían grandes distancias para anotar. Faltaba cooperación y juego colectivo.
Fue alrededor de 1875 que se introdujeron los pases, surgiendo el juego asociativo. Esto provocó la aparición de dos defensas que ocuparían el centro del campo para ayudar a recuperar el balón. Surgían los mediocampistas.
Sistema piramidal
A finales del siglo XIX los equipos ingleses continuaban a la vanguardia de la evolución táctica del juego y decidieron retrasar a otro atacante e incorporarlo al mediocampo, estableciendo un sistema de 2-3-5, conocido como el sistema piramidal, que dominaría el fútbol por los próximos años.
Surgió el mediocampista creativo y los extremos tenían como principal función desbordar y enviar centros al área que el delantero debía rematar.
Este sistema resultó poco flexible y muy físico, lo que volvía los partidos monótonos.
El cuadrado mágico
Para la década de 1920 existía el deseo de hacer el fútbol más atractivo, por lo que se realizaron modificaciones al “fuera de juego”, provocando una nueva evolución.
La defensa diagonal quedó obsoleta, por lo que se retrasaron los interiores. Dos defensas se movieron hacia los extremos, mientras que dos centrocampistas marcaban a los interiores rivales. Los interiores retrasaron su posición en la cancha para contribuir en defensa, aunque también participaban del juego creativo. Además, se estableció un sistema de marca personal.
Con extremos centradores, interiores que perforaban la línea rival y un delantero “matador”, nacía el sistema 3-4-3 (conocido en Italia como “cuadrado mágico”), que tuvo al Arsenal de Hebert Chapman como máximo exponente, ganando cinco ligas.
Este sistema tenía muchas variantes, y favorecía el juego colectivo, lo que marcó un antes y un después en la historia del fútbol.
El cerrojo suizo
La selección suiza comenzó a utilizar en los años 30 a un jugador detrás de los tres defensas, cuya función era garantizar una cobertura eficaz, recuperando el balón e interceptando a los delanteros. Este sistema fue adoptado por los equipos italianos, quienes utilizaban a este hombre “libre” detrás del mediocampo, para brindar solidez defensiva en esa porción de la cancha.
Poco vistoso, y muy criticado, este estilo garantiza una férrea defensa que sedujo a muchos entrenadores de la época.
Jogo bonito
El cerrojo suizo hizo evolucionar el juego a un sistema 4-3-3, pero la aparición de mediocampistas ofensivos provocó el surgimiento del 4-2-4, sistema ideal para un fútbol de ataque, que encontró en la selección de Brasil su principal exponente.
Los jugadores podían intercambiar roles. Existía mucha movilidad en la cancha, y un solo objetivo, marcar más goles que el contrario.
Si bien este estilo había sido utilizado por “Los Magiares Mágicos” húngaros, fue la popular canarinha, encabezada por Pelé, quien lo popularizó. La capacidad de los brasileños para asociarse y entender el juego ofensivo, enamoraron al mundo del balompié.
El catenaccio
La antípoda al fútbol ofensivo brasileño fue el catenaccio italiano. Basado en el sistema de cerrojo suizo, este estilo estrictamente defensivo tuvo por gran valedor a Helenio Herrera y su Inter de Milán, campeones de la Copa de Europa, actual Champions League.
El catenaccio no solo utilizaba un líbero, también retrasaba a otro delantero hacia el mediocampo, priorizando la defensa. El contraataque era la principal arma ofensiva.
Fútbol Total
En 1974, el entrenador holandés Rinus Michels consiguió establecer un estilo de juego novedoso para la época, basado en un fútbol asociativo, la presión por recuperar el balón y eliminando las posiciones estáticas. Este estilo, cuya base es que todos los jugadores atacan y todos defienden, fue conocido a nivel mundial como Fútbol Total, y sus principales exponentes fueron la selección holandesa y el club Ajax de Ámsterdam, liderados por el mítico Johan Cruyff.
El Fútbol Total requería más dinamismo por el movimiento constante de los jugadores que intercambian sus puestos. Los defensores incursionaban en ataque, mientras los delanteros colaboraban con la defensa. También se aumentó el ritmo de juego y se aprovechan mejor los espacios.
El 4-4-2
La necesidad de métodos defensivos más eficaces, y gobernar el centro del campo para neutralizar al adversario y controlar el ataque, llevó a la aparición del sistema 4-4-2. Este esquema, a su vez, provocó el surgimiento del volante enlace.
El objetivo era jugar un fútbol de rotaciones continuas y juego sin balón en ataque, con amplia utilización de las bandas. La defensa se basaría en la presión. También se demandaba una gran preparación física, por lo que se modificaron los entrenamientos.
Este estilo de juego dominó el escenario mundial durante muchos años, y aún hoy se mantiene vigente.
El 3-5-2
Con el objetivo equilibrar y hacer más ofensivo el juego, algunos equipos redujeron la defensa a un libero asistido por dos marcadores, y reforzaron el centro del campo con cinco jugadores, donde los laterales apoyaban a los dos únicos atacantes en un juego que abarcaba todo el terreno, intentando siempre tener superioridad numérica en las inmediaciones del balón.
Este sistema de 3-5-2 fue el utilizado en México 1986 por la selección argentina, equipo liderado por Diego Armando Maradona.
En la actualidad, este tipo de alineación es muy utilizada por los equipos de alta competición.
Años 90 y siglo XXI
Durante las últimas décadas no se ha apreciado una evolución táctica notable en el mundo del fútbol, sino una reinterpretación de los estilos. De esta forma, el Fútbol Total inspiró a Johan Cruyff en su etapa como entrenador a cargo del FC Barcelona, como también sirvió de base al llamado “tiki taka” empleado por la selección española entre 2008 y 2010, cuya columna vertebral eran los jugadores culés entrenados por Pep Guardiola.
Por otro lado, la solidez defensiva y el pragmatismo del catenaccio fue la base del exitoso Milán de los 90, la selección griega campeona de Europa o el sorprendente Leicester City en 2016.
El fútbol ha cambiado. Años antes se escuchaban los partidos por radio y hoy se pueden ver las transmisiones de fútbol vía online. Los estilos han evolucionado, y en la actualidad los entrenadores disponen de estadísticas de partidos, y adaptan los sistemas a sus jugadores con el objetivo de conseguir resultados que ilusionen a los hinchas. Porque, al final, los aficionados solo quieren ver a su equipo ganar.
