Ciencia y Tecnología.- Un elemento que ya forma parte de nuestra cotidianidad es el lenguaje digital, es decir, aquel asociado a las nuevas tecnologías de la comunicación. Uno de los elementos del cual forma parte este lenguaje son los mensajes de texto que, por cierto, este año celebran su 30º aniversario. Se trata de un recurso comunicacional que ha sido impulsado por la tecnología y los jóvenes y sobre el cual se sigue preguntando: ¿han distorsionado o mejorado nuestro lenguaje?

El SMS (short messages service) es un sistema fascinante de comunicación que tiene muchas ventajas, tarda solamente seis segundos en llegar desde cualquier sitio del planeta, permite la sincronía entre dos personas que se encuentren lejanas (acorta la distancia entre ellas) y, sobre todo, es accesible para todos. El Whatsapp no ha podido desplazarlo totalmente. Los mensajes de texto han cambiado la forma en que nos comunicamos y, aunque se ha expresado una gran preocupación por lo perjudicial que podrían ser para la alfabetización y la gramática, no hay pruebas reales que sugieran que sea así.

A pesar de la preocupación manifestada por los puristas del lenguaje, casi tres décadas de comunicación electrónica han demostrado que los hablantes aprenden a cambiar con confianza y precisión entre el lenguaje formal y el informal. Incluso se ha sugerido que los mensajes de texto pueden, de hecho, enriquecer la alfabetización, en lugar de obstaculizarla.

Lo que sí es cuestionable, como todo en la vida, es el abuso, en este caso de las siglas. Por ejemplo, un mensaje como este: HY PSO A SA, NTP, ¿MK?, TKM, N VMS DSPS, XOXO, A2. cuya traducción seria: "hoy paso al salir, no te preocupes, ¿me quieres?, te quiero mucho, nos vemos después, abrazos y besos, adiós".

Otro tema critico es la redacción y la ortografía. Pero los textos mal escritos no se deben a la influencia de los mensajes de texto o de la tecnología digital, es un problema que tiene que ver con la educación del que escribe. Por ejemplo, si alguien no lee (y estamos observando que la pérdida del hábito de la lectura va en aumento) comete más faltas de redacción y ortografía.

Hay pruebas que demuestran que actualmente el lenguaje se está volviendo más informal y más eficiente (ambos influidos por la tecnología) y los mensajes de texto (y ahora Whatsapp) han contribuido a esa transformación. Por lo que podemos concluir que el lenguaje digital es una ventaja, no un problema. El problema es no utilizarlo en forma adecuada.